El Canal de Panamá celebró esta semana 99 años, desde su apertura el 15 de agosto de 1914, dando inicio a una extensa agenda que ocupará exhibiciones, encuentros y difusión cultural para dar la bienvenida al Centenario del Canal.

Con 80 kilómetros de extensión, la vía panameña se convirtió desde entonces en un importante motor del comercio internacional, facilitando el paso entre el océano Atlántico y Pacífico.

Esta vía interoceánica favoreció el comercio mundial, reduciendo costos y tiempos de navegación. Además de impactar en el desarrollo tecnológico de múltiples equipos que se implementaron en la obra y funcionamiento del canal.

La Autoridad del Canal de Panamá (ACP) y la Administración de la vía estuvieron a cargo del acto en el cual se presentó el logotipo del Centenario del Canal que acompañará los diferentes homenajes.

“Desde aquel 15 de agosto de 1914, el Canal de Panamá ha conectado al mundo. Sólo hay que ver cómo los 14.000 barcos que cruzan cada año esta vía acuática llegan a 1.700 puertos en 160 países”, manifestó Roberto Roy, presidente de la Junta Directiva de la ACP y ministro para Asuntos del Canal.

Desde su inauguración, el canal se convirtió en una de las rutas de navegación interoceánica más importantes, uniendo el mar Caribe con el Océano Pacífico, atravesando el istmo de Panamá.

La obra, que fue ideada por el empresario francés Ferdinand de Lesseps, pasó a manos panameñas definitivamente en diciembre de 1999 tras la firma del tratado Torrijos-Carter con Estados Unidos, país que sostenía la administración plena.

En el marco de este acto, la ACP entregó el último informe trimestral sobre los avances de la ampliación, donde se detalla cómo se alcanzó el 60,4% de las obras concluidas, como excavaciones secas y dragados de las entradas de la vía en el Pacífico y el Atlántico, prácticamente, finalizada.

El proyecto de ampliación del Canal de Panamá se aprobó en 2006 con el objetivo de doblar la capacidad del canal y facilitar el caudal de tráfico. El mismo se inició en 2007 y se espera que esté concluido para mediados de 2015.

La iniciativa de ampliar el Canal, ruta por la que circula el 5% del comercio mundial, responde a la necesidad de afrontar los desafíos del sector comercial y logístico que proyecta el intercambio internacional de mercancías.

A la vez, este proyecto trajo aparejado una serie de modernizaciones en las infraestructuras de los puertos de la región, con la finalidad de mantenerse en el mercado competitivo.

Si bien la situación económica mundial también afectó el mejor funcionamiento, el Canal de Panamá “está pensando en el aumento en el transporte de gas licuado”, según expresó Jorge Luis Quijano, administrador de la ACP.

Además, explicó el funcionario, se estudia la posibilidad de un nuevo puerto de contenedores en Corozal, un puerto para buques especializados en transporte de vehículos y equipos pesados, y la posibilidad de ampliar un parque logístico sobre terrenos listos para la construcción.

Casi a un siglo de su inauguración, el Canal de Panamá, se actualiza y avanza a la par de las necesidades y exigencias del comercio mundial.