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12/11/19 | Noticias

La tensi贸n entre Alberto F. y Jair Bolsonaro pone en jaque a las exportaciones de autos

Image Luis Ceriotto

La tensi贸n entre el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, y el presidente electo, Alberto Fern谩ndez, es vista con mucha preocupaci贸n desde las terminales automotrices radicadas a ambos lados de la frontera. Para las f谩bricas argentinas, que est谩n cerrando 2019 como el peor a帽o desde 2005 (algunas, con una producci贸n inferior a la de los a帽os 鈥90), el mercado de Brasil fue el 煤nico que le dio algo de respiro: el 66% de todas las exportaciones, a su vez equivalente a 45% de la producci贸n total en lo que va del a帽o, 123.819 unidades, fue exportado hacia Brasil.

La Argentina le vende al pa铆s vecino sobre todo pick ups (Toyota Hilux, Ford Ranger, Volkswagen Amarok y, en menor escala, la Nissan Frontier) y algunos sedanes medianos, como el Chevrolet Cruze y, a una escala m谩s chica, el Citroen C4 Lounge. Tambi茅n le exporta utilitarios como el Peugeot Partner, el Citroen Berlingo y el Renault Kangoo. Entre enero y octubre de este a帽o, las exportaciones a Brasil cayeron 29% contra el mismo per铆odo del a帽o anterior. Pero con el resto del mundo las cosas fueron peores: el total exportado cay贸 33%.

Durante los primeros dos a帽os y medio de Mauricio Macri, la Argentina hab铆a llegado a ser una importante compradora de veh铆culos brasile帽os, a un ritmo de 600.000 unidades anuales, que coincidi贸 con el peor momento de ventas dentro del mercado de Brasil, con niveles de 1,8 mill贸n de unidades (hoy ya supera los 2,5 millones). Aquella situaci贸n qued贸 atenuada tras la devaluaci贸n: este a帽o la Argentina terminar谩 compr谩ndole a Brasil menos de 300.000 unidades y vendi茅ndole cerca de 200.000. Si bien el intercambio de veh铆culos seguir谩 siendo deficitario en unidades, es probable que termine siendo parejo en divisas, por el tipo de intercambio: mientras Brasil vende sobre todo veh铆culos chicos, las exportaciones locales son de pick ups y sedanes m谩s caros.

鈥淓l flex de intercambio entre los dos pa铆ses terminar谩 por debajo del 1,5 que se hab铆a acordado鈥, dijeron en el Gobierno. 鈥淓n el 煤ltimo a帽o y medio se corrigi贸 aquel desv铆o de comercio entre fines de 2015 y parte de 2018鈥.

Para tener una idea de la relevancia de Brasil como mercado, un pa铆s como M茅xico le compr贸 en el mismo per铆odo de enero-octubre apenas 5.700 veh铆culos a la Argentina. El dato no es ocioso: en su reciente visita a ese pa铆s, Alberto Fern谩ndez no disimul贸 sus expectativas de conversar con Andr茅s L贸pez Obrador un nuevo acuerdo automotor bilateral, como aquel que hab铆a negociado Mart铆n Redrado en 2003 y le hab铆a dado cierto ox铆geno a la industria local.

Pero en los a帽os transcurridos, M茅xico se transform贸 en una verdadera potencia automotriz, con una producci贸n que multiplica entre tres y cuatro veces su propio mercado interno (de un mill贸n de unidades al a帽o) y capacidad para abastecer al exigente mercado de EE.UU.. De hecho, durante 2018 el d茅ficit de la Argentina con ese pa铆s s贸lo en el rengl贸n de veh铆culos super贸 los 1.100 millones de d贸lares. Hoy el mercado de M茅xico representa apenas 3% de las exportaciones locales de veh铆culos.

Las terminales argentinas ven jaqueadas su competitividad por una presi贸n impositiva r茅cord en el mundo: cada auto hecho en el pa铆s tiene casi 55% de impuestos en su precio al p煤blico, seg煤n la Asociaci贸n de Fabricantes de Automotores (ADEFA). Y las cifras de su comercio exterior son elocuentes: el 煤nico mercado donde pueden vender veh铆culos de manera masiva es Brasil, donde ingresan con arancel cero.

As铆, una eventual crisis dentro del Mercosur, detonada por la tensi贸n personal entre los presidentes de Brasil y Argentina, dejar铆a a las terminales locales sin mercado donde vender sus productos. En lo que va del a帽o, por fuera de Brasil, el segundo pa铆s m谩s comprador de veh铆culos argentinos fue Per煤, con poco m谩s de 11.600 unidades: menos de la d茅cima parte de lo que compraron las terminales brasile帽as.

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