Logo

29/04/24 | Noticias

驴Por qu茅 no hay un boom de importaciones?

Image Por Mariano Kestelboim

Diversas variables de la econom铆a nacional se desploman como resultado de las pol铆ticas de ajuste, pero hay una particularmente llamativa por su magnitud y por producirse bajo un gobierno que hace gala de su liberalismo. Se trata de las importaciones que, con una aceleraci贸n pronunciada en marzo, llegaron a caer un 37% a nivel interanual (2.510 millones de d贸lares menos que en marzo de 2023), seg煤n el 煤ltimo informe del INDEC. Es una variaci贸n que super贸 a los picos de los meses m谩s afectados por la sequ铆a y la pandemia y habilit贸 un super谩vit comercial de 797 millones de d贸lares.

La baja es generalizada por rubros y por or铆genes. El 煤nico caso donde las compras externas aumentaron fue en los veh铆culos para pasajeros que tuvieron un incremento interanual en marzo del 14%.

El comportamiento de las importaciones en general suele ser proc铆clico y su volatilidad es mayor que la del nivel general de actividad, aunque en este caso la magnitud de la ca铆da es especialmente importante y hay una trastienda que revela la inconsistencia del modelo.

Razones de la ca铆da de las importaciones
La disminuci贸n de la actividad industrial determin贸 una parte de la merma de las importaciones debido al alto consumo del sector de bienes intermedios, m谩quinas, repuestos y partes fabricados en el exterior. El 煤ltimo dato disponible fue el de febrero pasado y el INDEC hab铆a registrado un descenso del producto fabril del 9,9%, mientras que la UIA para el mismo mes calcul贸 un rojo del 7% (en ese mes las importaciones cedieron un 18%). O sea, el mercado est谩 siendo m谩s abastecido por producci贸n nacional que por importaci贸n que el a帽o pasado, a pesar de la crisis industrial.

Ahora bien, la contracci贸n del consumo, derivada de las pol铆ticas p煤blicas de distribuci贸n regresiva del ingreso, es la base central de la ca铆da general de la actividad y de las compras externas. Para el mismo mes de marzo, la C谩mara Argentina de Comercio y Servicios estim贸 una reducci贸n de 3,8% del consumo y la C谩mara Argentina de la Mediana Empresa calcul贸 que las ventas de pymes descendieron un -12,6%. Los datos de consumo agregados del PIB que elabora el INDEC a煤n no est谩n disponibles.

De todas maneras, hay una serie de factores que complejizan el escenario y hacen muy sorprendente el bajo nivel de importaci贸n:

1. El atraso cambiario: si bien los desproporcionados aumentos del tipo de cambio oficial (+118%) y de la al铆cuota del impuesto PAIS sobre las importaciones (pas贸 del 7,5% al 17,5%) de diciembre pasado desalentaron en un principio el negocio importador, la posterior alza de la inflaci贸n (entre diciembre y marzo, acumul贸 un 90,2%) y un tipo de cambio oficial relativamente estable y d贸lares financieros en baja deber铆a haber impulsado la importaci贸n.

2. El bajo grado de apertura econ贸mica: hay tambi茅n un factor estructural que deber铆a, en teor铆a, haber contribuido a moderar la ca铆da de las importaciones. Argentina se ha caracterizado por ser una econom铆a con un reducido grado de apertura comercial en relaci贸n al resto del mundo. Las importaciones en la 煤ltima d茅cada han tendido a equivaler al 11% del PIB, mientras que en el mundo esa relaci贸n es del 27% y en las otras dos econom铆as m谩s grandes de Latinoam茅rica la relaci贸n es tambi茅n significativamente m谩s alta: Brasil (14%) y M茅xico (41%). En consecuencia, el nivel de apertura ya era muy bajo en los 煤ltimos a帽os como para soportar una contracci贸n tan importante en 2024.

3. La eliminaci贸n de controles a las importaciones y las facilidades a los importadores: el fin del r茅gimen de Licencias No Autom谩ticas de Importaci贸n y las mejores condiciones de las importaciones de bienes de la canasta b谩sica (alimentos, bebidas, limpieza e higiene) a trav茅s de una reducci贸n del plazo de pago de importaciones y la suspensi贸n del cobro de la percepci贸n de IVA adicional y del impuesto a las ganancias tampoco parece haber hecho mella.

4. Las subas de precios de bienes importados inferiores a las de los nacionales: la comparaci贸n de la evoluci贸n de los 铆ndices de precios mayoristas de productos nacionales e importados hace todav铆a m谩s impactante la brusca ca铆da de las importaciones, ya que los precios de los bienes nacionales subieron considerablemente m谩s que los importados entre diciembre y marzo. Los primeros se incrementaron un 113,1%, mientras que los importados ascendieron solo un 91,5%.

Ese mayor aumento de lo nacional por encima de lo importado se debe en parte a la desregulaci贸n de los mercados. La liberaci贸n de precios de los productores nacionales en un contexto donde predomin贸 la expectativa de un aumento a煤n mayor del tipo de cambio, motorizado posiblemente por las expresiones incendiarias del presidente Javier Milei que aseguraba que le hab铆an 鈥減lantado鈥 una hiperinflaci贸n, alent贸 comportamientos comerciales abusivos. La menor suba de los precios de lo importado tambi茅n tiene como causa el enorme deterioro del poder adquisitivo de la poblaci贸n que gener贸 un inesperado aumento de stocks.

Adem谩s, las empresas importadoras han tendido a preferir importar bienes m谩s econ贸micos para ofrecer en el mercado local y as铆 el nivel general de precios de los productos importados se redujo un 6,9%, medido en d贸lares. Un mayor descenso todav铆a se verific贸 en el precio de los bienes intermedios demandados por la industria en el exterior que, con una baja de precios registrada del 18% (tambi茅n en d贸lares), tambi茅n da la pauta que en general habr铆an decidido ahorrar costos de producci贸n fabricando bienes de menor calidad y/o prestaciones, sin que esa pol铆tica modere sus decisiones alcistas de precios.

Sin dudas, la gran brecha de aumentos de precios entre lo importado y lo nacional deber铆a haber inclinado la preferencia hacia el abastecimiento externo en detrimento de lo nacional. Sin embargo, las se帽ales de precios tan adoradas por Milei evidentemente no pudieron vencer el impacto de las trabas a las importaciones que ha decidido mantener. Efectivamente, el motivo fundamental de la ca铆da de las importaciones obedece al sistema de pago de las importaciones dise帽ado por el Banco Central. Los exportadores que destinan su mercader铆a a Argentina demandan el pago por anticipado y nuestro pa铆s reci茅n termina de cancelar sus compromisos a los 120 d铆as de recibida la mercader铆a que se paga en cuatro cuotas, una cada 30 d铆as.

Aunque desde el 15 de abril el gobierno cedi贸 a que las pymes puedan cancelar sus compras en el exterior en 30 d铆as, eso tampoco parece ser suficiente para reanimar el negocio de la importaci贸n. Los embarques procedentes de China, por ejemplo, demoran 45 d铆as en llegar al pa铆s. En consecuencia, el importador tiene que conseguir que el exportador o alg煤n banco en el exterior lo financie por 75 d铆as (45 d铆as de tiempo de transporte m谩s los 30 d铆as que el gobierno demora en habilitar el pago desde que la mercader铆a arriba al pa铆s). Con una deuda comercial que, en muchos casos es bastante abultada, pocos est谩n en condiciones de importar todo lo que desean.

En cambio, las empresas transnacionales que producen donde optimizan globalmente sus negocios pueden acceder a ese financiamiento. Es el caso, por ejemplo, del sector automotriz que, como vimos, en marzo fue la excepci贸n y ha podido incrementar sus importaciones.

Tal como funciona el sistema actual de importaci贸n se promueve un renovado proceso de concentraci贸n y extranjerizaci贸n de la econom铆a. Las empresas grandes y extranjerizadas pueden acceder a condiciones mucho m谩s favorables que las pymes para el financiamiento de compras de insumos o complementos de su oferta en el exterior.

En este esquema actual de precios relativos e incentivos macroecon贸micos, levantar esas restricciones y el 鈥渃epo鈥 implicar铆a una real explosi贸n de la importaci贸n y, en consecuencia, una gran presi贸n alcista sobre la cotizaci贸n del d贸lar y, paso seguido, un nuevo desmadre inflacionario. Al menos, parece que Luis Caputo y Nicol谩s Posee lo saben y, por eso, est谩n desesperados por conseguir un financiamiento externo que habilite a las empresas a importar sin desencadenar una abrupta suba en el tipo de cambio.

A la vez, el esquema macroecon贸mico, con el impuesto PAIS al 17,5%, se ha vuelto muy dependiente de esos ingresos fiscales (ya representan el 8% del total de la recaudaci贸n tributaria nacional) que se da de bruces con las disposiciones de la Organizaci贸n Mundial del Comercio y encarece los costos de la estructura productiva nacional. El sector productivo, adem谩s, sufre un creciente atraso cambiario que erosiona progresivamente su competitividad con un mercado interno que d铆a a d铆a pierde escala por su contracci贸n y que debe afrontar aumentos exponenciales de los costos de tarifas de servicios p煤blicos y combustibles.

En definitiva, las 煤ltimas decisiones de pol铆tica econ贸mica han generado un engendro muy peligroso y dif铆cil de resolver. Ojal谩 que realmente Milei sea el Lionel Scaloni de los presidentes, como 茅l mismo imagin贸. Lamentablemente, las pol铆ticas que aplica generan una fuerza incontrolable que cuando estalle no producir谩 precisamente una algarab铆a popular.

Economista, asesor de empresas y c谩maras industriales y docente universitario

Image Image Image Image