Después de la salida de Daniel Funes de Rioja, las empresas alimentarias están diseñando una nueva agenda para debatir con el gobierno. Las nuevas autoridades de COPAL sucederán a Funes de Rioja después de 16 años de gestión y estarán a cargo de esta "hoja de ruta" renovada. Funes de Rioja también es titular de la UIA.

En un contexto de tensión por la apertura de las importaciones de alimentos, el debate político por la Ley ómnibus, el fuerte aumento de los precios de la canasta alimentaria, la lucha contra la inflación y la recesión que afecta al consumo, Funes de Rioja se retiró argumentando un tema de recambio generacional y por incompatibilidad de funciones con su cargo en la UIA.

Las grandes empresas alimentarias locales, como Coca Cola, Ledesma, Arcor y Molinos, ahora tendrán una mayor representación en el sector, tras la apertura de las importaciones decretada por el gobierno Milei para presionar a las empresas locales a bajar sus precios.

Carla Martín Bonito, sucesora de Funes de Rioja, es la primera mujer en asumir ese puesto en los 50 años de historia de la entidad. Ella asume en un entorno complejo, con medidas regulatorias y cepos impuestos por el gobierno anterior.

Bonito, que anteriormente se desempeñaba como CEO de la entidad, conoce los problemas empresariales y las "amenazas" que enfrentan las compañías debido a la apertura importadora.

En su gestión, Bonito está acompañada por el secretario Agustín Torres Campbell (Molinos), el tesorero Gonzalo Fagioli (Quilmes), el vicepresidente primero, Diego Cifarelli (FAIM, Federación Molinera), y el vicepresidente segundo, Adrián Kaufmann Brea (Arcor), entre otros.

Desde que asumieron, el nuevo grupo de directivos de la entidad alimenticia se ha dedicado a conformar la "nueva" hoja de ruta post Funes de Rioja que pretenden debatir con las autoridades del gobierno de Javier Milei.


Impuestos y competitividad
Durante la primera semana de gestión, el nuevo equipo directivo se centró en su agenda de relaciones con el sector público, abordando la internacionalización de sus sectores y la competitividad, especialmente en la discusión tributaria. La semana pasada, se reunieron con Marcelo Cima, secretario de Relaciones Económicas Internacionales, para profundizar en acciones de promoción comercial y acceso a nuevos mercados.

En este contexto, se anticipó una gira de autoridades de la Cancillería a Brasil, donde COPAL identificó restricciones al acceso al mercado del Mercosur, como demoras administrativas y observaciones "infundadas" por parte de la autoridad sanitaria brasileña (MAPA), así como plazos extensos para la internalización de normas alimentarias armonizadas a nivel Mercosur.

Además, COPAL participó, a través de su Presidente, en la comitiva de la UIA que acompañó a la canciller Diana Mondino en la visita a la Federación de Industrias del Estado de San Pablo (FIESP), con el objetivo de ampliar las oportunidades comerciales e inversiones, fortaleciendo el Mercosur y promoviendo un mayor dinamismo en la región.

Coincidencias y diferencias
Durante el viaje a San Pablo, José Urtubey, titular de la UIA, y Daniel Funes de Rioja, máxima autoridad de COPAL, coincidieron en el seminario "Argentina: Oportunidades Comerciales y de Inversión". Aunque la agenda incluyó reuniones con la FIESP y 150 industriales paulistas, las opiniones de Urtubey y Funes de Rioja no coincidieron completamente. Mientras las empresas alimenticias se quejaban de las trabas en los vínculos con Brasil, un abogado laboralista destacó el vínculo productivo entre ambos países.

En el seminario, el abogado resaltó la capacidad de la región para transformar recursos naturales en productos elaborados, mencionando sectores como energía, minería, alimentos, maquinaria, automotriz, celulósico papelero, farmacéutico e industria textil.

La UIA expresó la importancia de relanzar el Mercosur como plataforma exportadora y trabajar en su desburocratización, para armonizar la normativa y agregar valor a lo que produce la región. Por su parte, COPAL estableció un canal de diálogo con la Dirección General de Aduana para abordar temas de comercio exterior de alimentos y bebidas.

Además, COPAL se reunió con autoridades de Interior y Municipios para expresar preocupación por iniciativas tributarias que aumentan la carga fiscal en alimentos y bebidas. Se propuso trabajar en la reducción de la carga tributaria y la simplificación administrativa para mejorar la competitividad del sector.