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28/10/23 | Interior del pais

Exportaciones de vinos muestran el nivel más bajo de los últimos 18 años

Image En los primeros seis meses del corriente año, las colocaciones externas totalizaron los 88 millones de litros, volumen que refleja una caída interanual del orden del 31%. En valores se observó un retroceso del 21%.

Las dificultades para poder importar insumos, la falta de estímulos para exportar, una inflación descontrolada, y el impacto en las cosechas de la sequía y las heladas tardías terminan por dar un panorama muy poco alentador para la industria vitivinícola argentina.
Parte de esta crisis, está reflejada en la retracción que vienen sufriendo sus exportaciones. Todo un síntoma. En los primeros seis meses del corriente año, las colocaciones externas de vinos totalizaron los 88 millones de litros, volumen que refleja una caída interanual del orden del 31% y muestra el nivel más bajo de exportaciones de los últimos 18 años.

La caída refleja el estado de situación por el que atraviesa la actividad. Pero mucho más completa fue la explicación que dio el Javier Merino, economista y responsable del Centro de Estudios Económicos de Bodegas de Argentina (Ceeba). La cosecha de uvas de 2023 fue la más baja en décadas, resultado que estuvo directamente relacionado a eventos climáticos excepcionales, equivalentes a los que se observan en distintas regiones del planeta -competidoras en el mercado global de vinos- lo que otorga una cuota de incertidumbre hacia el futuro por la repetición de su ocurrencia.
“Sin embargo, este evento de la vitivinicultura argentina se da adicionalmente a otras situaciones que datan ya de varios años como la menor cantidad de vino vendido por las bodegas, una considerable merma en la inversión en viñedos por baja rentabilidad y la acotada disponibilidad de crédito de largo plazo en combinación con un cambio de hábito de los consumidores hacia categorías más altas de precios. En resumen el viñedo argentino ha disminuido su superficie y ha bajado su rendimiento más allá de la reconversión hacia otras regiones y variedadesâ€, sostuvo Merino, hace tan solo un mes, durante una exposición que hizo en la Bodega Tapiz de Luján de Cuyo, Mendoza.

Las exportaciones en valores también mostraron un claro retroceso, aunque no tan pronunciado como la registrada por volúmenes. Según datos de la aduana argentina, analizados por el Observatorio Español del Mercado del Vino (OEMV), Argentina redujo sus colocaciones externas un 20,9% en valor en el primer semestre de 2023, hasta los 304,7 millones de dólares, a un precio medio un 14% superior en términos interanuales, hasta los 3,46 dólares/litro (+42 centavos). Hay que remontarse al año 2009 para encontrarnos con un primer semestre tan negativo en valores.

Las exportaciones argentinas de vino iniciaron 2023 (mes de enero) muy estables en volumen (-0,3%) y con un crecimiento del 29,4% en valor; sin embargo, han enlazado 5 meses consecutivos de fortísimas pérdidas en ambos aspectos. Argentina ya redujo sus exportaciones en 2022 respecto al año 2021, aunque mucho menos que como lo hace ahora.
Crisis en todas las categorías
Todos los tipos de vino registraron importantes pérdidas en el primer semestre de 2023, tanto en valor como en volumen, con el espumoso como único que bajó de precio.

Según detalla el informe del OEMV, el vino envasado fue el que menos cayó y repite como primer vino exportado de forma muy clara, con 68,8 millones de litros (-25,9%) y 283,7 millones de dólares (-19,7%), el 78% del volumen y el 93% de la facturación total. En cambio, el granel pierde cuota como segundo vino exportado, al caer un 44% en volumen y un 33,6% en valor, hasta los 18,6 millones de litros y los 18,8 millones de dólares.

Lejos de los dos anteriores, el espumoso cayó más en valor (-39,5%) que en volumen (-28,5%), hasta los 2,1 millones de dólares y los 608.000 litros, al bajar de precio un 15,3% hasta los 3,41 dólares/litro; el envasado se convierte en el vino más caro exportado por Argentina, con 4,12 dólares/litro (+8,3%), superando al espumoso.

El granel se encareció un 18,3%, hasta los 1,01 dólares/litro. Sin apenas presencia en exportación, las ventas de vino en formato bag-in-box cayeron un 52,8% en volumen y un 23,6% en valor, hasta los 35.205 litros y los 108.385 dólares, a un precio medio que subió por encima del 60%, hasta los 3,08 dólares/litro.

Brasil, única nota positiva
Argentina exportó vino a un total de 70 mercados internacionales en el primer semestre de 2023. Entre los 10 primeros, sólo crecieron las ventas a Brasil, que se consolida como tercer cliente con casi 13 millones de litros (+3,5%) y 41,8 millones de dólares (+11,5%), a un precio medio un 7,7% mayor, hasta los 3,22 dólares/litro.

Estados Unidos fue el principal protagonista de la caída global: se mantiene como primer cliente en valor pese a caer un 30%, hasta los 86,3 millones de dólares, seguido de lejos por los 49,4 millones de Reino Unido (-13,3%); sin embargo, Estados Unidos ha dejado de ser el primer mercado en volumen, al caer un 49% hasta los 19,7 millones de litros, superado por Reino Unido, con 23,5 millones (-9%).

El precio de venta a EE.UU. se disparó un 37% hasta los 4,39 dólares/litro, muy superior a los 2,10 dólares de Reino Unido (-4,7%), de ahí su mayor cuota en valor. Reino Unido registró el precio más bajo entre los analizados, único además que bajó respecto al primer semestre de 2022. Hay que puntualizar que el vino a granel tiene más cuota en Reino Unido (64% del volumen total) que en el resto de mercados analizados. Por otra parte, Canadá, cuarto mercado con 4,4 millones de litros (-29,7%) y 18,8 millones de dólares (-22,5%), cayó de forma similar a la media. México se hace fuerte como quinto cliente al caer apenas un 2%, hasta los 4,2 millones de litros y los 13,6 millones de dólares, tras un buen mes de junio.

Por último, el informe destaca la fortísima caída de las exportaciones a Países Bajos, Alemania, Paraguay, Colombia, Perú, Rusia o Suecia, entre otros.


FUENTE: LMNEUQUÉN.COM

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